lunes, 23 de diciembre de 2013

¡Feliz Navidad!

Qué consuelo comprobar cada año por estas fechas, que un Dios ha sido capaz de hacerse Niño y nacer en un pesebre por nosotros.

Una vez más nos recuerda algo grande: que el dolor, la enfermedad, o cualquier contrariedad, no son más que pequeños despertadores que nos advierten de algo importante: que después de esta vida nos espera el cielo.

Me he propuesto para este año 2014 hacer lo imposible para que muchas otras personas lo descubran.

¡¡Feliz Navidad y próspero año nuevo a todos los que de vez en cuando "pasáis" por este blog!!


No hay comentarios:

Publicar un comentario