El libro

El invitado imprevisto es un pequeño libro que narra una aventura grande: cómo se puede ser feliz en el dolor y cómo se puede ayudar a otros desde la propia necesidad; cómo una silla de ruedas puede ser movida por la robótica espiritual de una sonrisa.

No es un libro que se mueva por afán de lucro. Es un libro que pretende llenar de esperanza a mucha gente en la misma situación, similar o peor que la mía. Por esto, el coste de la primera edición se ha cubierto íntegramete por danativos de gente desinteresada que se ha sentido identificada por por lo que en él se transmite.

Gracias a Dios, el libro ha llegado ya a muchas personas y, en breve, espero publicar una segunda edición, también financiada por donativos.

Quizá, lo que dice Antoni Coll en el prólogo del libro refleja muy bien lo que me gustaría conseguir con estas pocas páginas: llenar de esperanza a tanta gente que no la encuentra y querría encontrarla:
Joaquín Romero presiente que su vida no será tan larga como la de una persona sana, pero consciente de que se siente en manos de Dios, está seguro de que tendrá un "final feliz", cuando, por la misericordia divina, sea llamado a disfrutar de una vida eterna sin las limitaciones del presente. (Puedes leer el prólogo entero aquí)
Si quieres, puedes dejar un comentario sobre el libro aquí mismo. ¡Muchas gracias!
***
Ahora, también lo puedes escuchar en castellano y en catalán:


También en Ivoox o Apple 


També a Ivoox o Apple 

***

Al fallecer Joaquín, el 6 de julio de 2018, se recibieron muchos escritos de personas que tuvieron la oportunidad de conocerle más o menos. Antoni Coll, el periodista que trabajó con Joaquín El invitado imprevisto, recopiló estos testimonios en capítulos, según distintos temas: La victoria de la alegría

Este libro, también en castellano y en catalán, se puede escuchar aquí:


También en Ivoox o Apple 


També a Ivoox o Apple 

24 comentarios:

  1. Hola Joaquin,

    Susana y yo nos hemos leido tu libro en un par de dias, nos ha encantado. Lo que mas nos ha impresionado es la de veces que repites que sobretodo lo que realmente ta ha ayudado a sobrellevar tu enfermedad ha sido la fe que te han dado tus padres.Espero que todos nosotros, como padres, sepamos actuar igual con nuestros hijos. Un abrazo muy fuerte. Victor Infiesta.

    ResponderEliminar
  2. Víctor y Susana: gracias por vuestro comentario.

    Cuando falleció mi padre hace dos años no imaginé el valor tan grande que podría llegar a tener esa fe que comentáis.

    Aparentemente podría parecer mejor heredar una fortuna económica, pero prefiero con mucha diferencia el tesoro que me han transmitido desde que era pequeño.

    Ahora que tanto necesito de ella me siento plenamente compensado.

    Precisamente por esta fe estoy convencido que existe algo más después de esta vida, y que ahora mi padre podrá recibir mi agradecimiento.

    ResponderEliminar
  3. Hola, Joaquín.

    Hace unos días me he leído tu libro, y me ha ayudado a conocerte. Veo que no tienes miedo a mostrarte tal como eres. Cuentas las cosas con tal naturalidad que, si no te conociera, quizás pensaría "no puede ser verdad, me está tomando el pelo".

    El tema del sentido del sufrimiento y de la visión cristiana de la vida creo que es tan importante, que hacen que el libro le pueda servir a cualquiera. Porque cualquiera, aunque no sufra grandes discapacidades o sufrimientos, puede sentirse sólo y no encontrar sentido a su vida, si no es con la visión de la fe que tú transmites en tu libro.

    Ánimo con la difusión del libro, que seguro que será de ayuda para mucha gente.

    ¡Un abrazo!

    Óscar

    ResponderEliminar
  4. Victor López-Jurado31/8/10, 17:39

    Hola Joaquin
    Cuando estaba en Barcelona compré tu libro con la intención de regalar a mi amigo sordo que me había invitado a comer en su casa de verano en Cabrera del Mar y no me dio tiempo leer todo el libro. También me ha gustado mucho tu blog.

    Como soy sordo que vivo en Madrid me gustaria comprar unos cuantos libros que estoy seguro de que harán mucho bien para mis amigos.

    Espero que me digas dónde puedo conseguirlo.

    Un abrazo

    Víctor

    ResponderEliminar
  5. Óscar:

    Me alegra volver a tener noticias tuyas.

    Para sorpresas la mía cuando compruebo que el simple hecho de explicar todo lo que he recibido estos años de enfermedad, puede ayudar a otras personas.

    Tú sabes que soy arquitecto técnico y que por mi formación académica nunca imaginé escribir un libro, me alegra que te haya sido de utilidad.

    Animo a cualquier otra persona que pueda leer estas líneas a que bucee en este misterio del dolor.

    En este sentido creo que el sentido del dolor y de la vida coinciden en muchos aspectos.

    Hasta pronto y gracias:

    Joaquín

    ResponderEliminar
  6. Víctor,
    gracias por tu mensaje.
    Como supongo sabrás, el libro no nace con ánimo de lucro. He distribuido esta primera edición entre mis amigos y conocidos, de forma desinteresada, ya que sólo pretendo transmitir a la sociedad unos valores de los que me parece está necesitada.

    Este aspecto lo he podido comprobar de primera persona, como enfermo y también por mi trabajo.

    Sólo quedan seis ejemplares de la primera edición (de unos 1000), y 150 que he guardado para la presentación del libro, que será próximamente (lo avisaré en el blog).

    También estamos moviendo hilos para publicar una segunda edición. Cuando salga, también lo anunciaré por el blog.

    Te agradezco tus noticias, y seguiremos en contacto.

    Un saludo,
    Joaquín

    ResponderEliminar
  7. Querido Joaquín, buenas noches
    Echo de menos nuestras conversaciones comiendo juntos en tu casa. Cuando me has llamado esta tarde para felicitarme por mi aniversario de bodas, me ha hecho mucha ilusión y no he podido dejar de pensar en todo el bien que me has podido hacer. No tengo ningún ejemplar de tu libro, y según me ha podido adelantar mi hermano Víctor, es una "pasada". Me encantaría tener un ejemplar de esos 6 que te quedan, así que esta semana te llamo y a ver si podemos vernos. Un abrazo. Alfonso Infiesta

    ResponderEliminar
  8. Alfonso:

    Gracias por tu mensaje, tenía ganas de volver a tener noticias tuyas.

    Respecto a los seis ejemplares, ya sólo quedan dos, así que tendremos que vernos antes, pues los entrego por riguroso orden.

    Esta misma mañana me he encontrado con mi antigua vecina y le he ofrecido uno.

    Esta señora es la viuda de Alfonso Comín, que como sabes fue un personaje distinguido en Barcelona, y cuando vivía con mis padres, nos guardábamos mutuo afecto, ya que vivíamos en el mismo rellano y compartí algunos momentos de mi infancia con sus hijos.

    Tengo reservados 150 ejemplares para la presentación del libro, que probablemente será el día 6 de octubre (me lo tienen que confirmar todavía, en el aula magna de la escuela Abat Oliva, poco antes de la entrega de los premios Romper Barreras.

    Mientras, puedes consultar este blog que me ha hecho mi amigo Jaume Figa.

    Un abrazo y muchos recuerdos a tu mujer y a tus hijos:

    Joaquín

    ResponderEliminar
  9. Hola Joaquin soy Maria y tengo 11 años.
    Me ha encantado tú libro, sobretodo la fe que tienes y el amor a tus padres... Pero sobretodo lo que me ha gustado más es la anecdota que cuentas que cuando la enfermedad te picó a la puerta, tú en vez de enfadarte y no abrile, la abristes y le dijiste: "sirvete tú mismo". Me encantaría ser tan fuerte como tú.

    ResponderEliminar
  10. María,

    Muchas gracias por tus noticias.

    Mi padre nos dejó hace dos años y nunca llegué a imaginar la fortuna tan grande que me había dejado con la fe hasta ese momento.

    Suelo explicar a mis amigos que era tanto el cariño que sentía por él, que ahora no estoy dispuesto a dejar de luchar -con la ayuda de Jesús y de la virgen- y, así, poder estar toda la eternidad con él en el cielo.

    No nací enfermo, ¡claro!, y esto me ha ayudado a darme cuenta de que tanto la fe, como la fortaleza ante la enfermedad, es prestada.

    Te animo a que invites a amigas tuyas a leer el libro y comentar su impresión en el blog.

    Como sabrás en el mismo están reproducidos íntegramente dos capítulos del libro: el prólogo y la entrevista.

    Gracias y hasta pronto:

    Joaquín

    ResponderEliminar
  11. Hola Joaquín,
    Soy Carlos Serrano, actualmente compartimos una satisfacción común; ofrecer a las personas con discapacidad la tecnología que les permita mejorar considerablemente su calidad de vida y su autonomía, a más comparto contigo otro aspecto muy importante para mí, una gran amistad, podríamos decir como tu bien sabes, que ya somos amigos. ;-)
    BJ me ha hecho ser más persona y ver las cosas desde otra perspectiva, a parte de la "J" de Bj, que no sé de quien será? ;-) Para mí está Joaquín, un gran amigo. Tu libro me ha gustado mucho, tanto que me lo leí de una sentada, estaba intrigado por leer palabras tuyas plasmadas en un papel. Personalmente te felicito, y que más decirte que ya no sepas! pues que aquí estoy para lo que necesites o requieras! que te valoro y te aprecio muchísimo. Gracias por ser como eres!
    Carlos.

    ResponderEliminar
  12. Carlos:

    Nos vemos a diario en el trabajo y a veces resulta difícil explicar a personas que no me conocen, el ambiente que se respira en la empresa.

    Tengo dos recuerdos que me son especialmente gratos: el día que entraste a formar parte del equipo de BJ y pusiste cara de asombro, cuando te explicamos que en la punta de la pirámide del organigrama de BJ, están nuestros clientes, y que el resto del personal nos debemos a ellos.

    El otro momento fue cuando el trato entre nosotros empezó a salirse de lo que es estrictamente una relación contractual, y... digamos que decidimos por mutuo acuerdo, que podíamos ser amigos, ¿no? ;)

    Me alegra ver el servicio tan grande que haces con tu trabajo y te deseo, como amigo, que también puedas tocar de cerca la suerte que he tenido con la fe que me transmitieron mis padres. ¡Ojalá que tantos que se van acercando a este blog también lo puedan conocer!

    Hasta siempre:

    Joaquín

    ResponderEliminar
  13. Hola Joaquin, He leido tu libro, es precioso y cuando lo empiezas no puedes dejarlo. El libro está lleno de esperanza para todos aquellos que pasan por situaciones dificiles. Creo que el ofrecer todas estas cosas que te estan pasando hacen grande a la persona. Es un gran reto para la vida. Tu libro hará mucho bien. Un abrazo. Magda Ramoneda

    ResponderEliminar
  14. Magda:

    Gracias por tu comentario.

    Precisamente la esperanza que comentas es uno de los valores que le pedí a mi amigo Antonio Coll que destacara especialmente.

    Como sabes Toni es periodista y es la persona que me ha ayudado a escribir el libro; tiene muy buena pluma. Él me conoce desde que jugaba a fútbol.

    Curiosamente el invitado imprevisto siempre llama la puerta, habitualmente cuando uno menos lo espera.

    Veo muy interesante que cualquier persona pueda dar respuesta a los múltiples interrogantes que plantea una enfermedad, sea del tipo que sea, o simplemente una pequeña contrariedad.

    Te agradeceré me ayudes a difundir el libro y el blog, entre tus conocidos.

    Afortunadamente el tamaño y las características de una persona no son lo que hace grande a la misma. Personalmente opino que hay una parte, que exteriormente no se ve, y que sin embargo diferencia a una persona de otra.

    Esto que te comento se puede reflejar en los candidatos y ganadores de los premios Romper Barreras de este año y de los anteriores.

    Hasta pronto y otra vez gracias

    ResponderEliminar
  15. Querido Joaquín:

    Supongo que es providencia divina. Hoy ha caído en mis manos tu libro y lo acabo de cerrar. Digo providencia porque yo también he recibido la visita del invitado imprevisto. Y el visitante fue de lo más inoportuno: una semana antes de mi boda, en la fiesta de Nuestra Señora de Montserrat del año pasado. Gracias a Dios, aunque provengo de una familia poco creyente y menos practicante, de joven me comprometí a seguir al Señor y es eso lo que me ha dado fuerzas para aceptar la situación. Recuerdo a menudo un texto que creo que es de Santa Teresa: "La cruz abrazada se lleva mejor". Y eso es lo que quiero hacer, abrazar mi cruz, amar mi cruz, para "quitarle peso" a Jesús o para completar "lo que falta a la pasión de Cristo", que decía san Pablo. Pese a ello, todavía no tengo muy buena relación, digamos que nos estamos conociendo. Por el momento es bastante callado. Me diagnosticaron la enfermedad a partir del segundo brote de neuritis óptica (el primero fue hace 8 años). Lo primero que le dije al Señor en el sagrario, después de llorar mucho, lamentarme y preguntarme muchas cosas, fue: "Estamos juntos en esto". Y así creo que es, que Jesús sufre conmigo, que es una cruz que llevamos los dos. Y soy feliz así. Por supuesto, me he casado: la que es ahora mi esposa no tuvo ninguna duda tras conocer el diagnóstico. Doy gracias a Dios cada día por ella, porque ha querido aceptar mi cruz como su propia cruz y convertirse en mi enfermera particular en un acto que, yo creo, es propio de los santos. Y no sólo eso, con la opinión favorable de mi neuróloga y de sacerdotes a los que hemos consultado, nos hemos atrevido a tener hijos y apenas hace un mes que han nacido nuestro par de mellizos. El Señor nos ha bendecido abundantemente. Me siento bien, no tengo ninguna molestia, me estoy tratando y de momento puedo dar gracias por poder hacer vida completamente normal. Pero no soy ingenuo y sé que la cosa puede empeorar. Espero que cuando eso pase el Señor me dé la misma fuerza que tú tienes, la misma alegría y esperanza, para no desfallecer. Me ha hecho mucho bien leer tus palabras, tu testimonio. Sé que rezas por muchos, que tienes muchos nombres en la cabeza por los que ofrecer tus dolores, pero te pido que al menos un día te acuerdes de mí en tu diálogo con el Señor. Yo haré lo mismo por ti. Muchísimas gracias. Recibe un abrazo fraterno de un hermano en Cristo.

    ResponderEliminar
  16. Sergio:

    Gracias por tu e-mail y por la lección que me has dado, me has ayudado mucho.

    Nunca en 21 años de enfermedad me había planteado con tanta frecuencia el sentido de mi vida.

    Resulta que conforme avanza la enfermedad y compruebo cómo poco a poco me voy consumiendo, me doy cada vez más cuenta que estoy de paso.

    El otro día un profesional del taxi adaptado, que utilizo cada semana, me dijo que también había leído el libro y que le había gustado, pero añadió, "que conste que yo no soy creyente, eh".

    Entonces aproveché la ocasión para decirle que tengo mucho interés por saber qué sentido da a la enfermedad un profesional del taxi como él… después de unos segundos de silencio me dijo que no lo sabía.

    Realmente fuera del sentido de la trascendencia he podido comprobar que no existe. Te digo esto como afectado, no como teólogo.

    Opino que a ti y a mí Dios nos ha concedido el privilegio de llevar una pequeña astilla de su cruz.

    En una ocasión, superado por las molestias y dolores, le dije a un sacerdote amigo que no podía más y me hizo una pregunta que me desconcertó: ¿tienes una cinta métrica ? En aquel momento estaba en mi casa y le dije que podría encontrarla en el armario. Él la cogió y me preguntó cuántos años tenía, le dije en aquel entonces, que 40, a continuación me pidió que sujetara el extremo de la cinta, mientras él marcaba el número 40. A continuación me dijo que soltara y la cinta se enrolló rápidamente. Me quedé mirando expectante y añadió: ¿ves esto?; y me aclaró ante mi cara de duda, esto no es más que el paso tuyo y mío por la tierra. Como si no hubiera tenido bastante con la respuesta añadió: no podemos comparar este tiempo tan corto con toda una eternidad, así que te animo a que vayas al sagrario, te desahogues con el Señor, consideres lo que tienes que hacer para conseguir este premio y quédate tranquilo.

    Disculpa que te haya contado algo tan personal, pero aquello me hace recordar que ahora mismo lo único que da sentido a mi vida es el cielo y hacer todo lo posible para que muchas otras personas puedan ganárselo.

    Me gustaría conocer a tu familia, seguro que nos entenderemos muy bien.

    Hasta pronto y un abrazo:

    Joaquín

    ResponderEliminar
  17. Querido Joaquín:
    El pasado viernes fuí a hacer la visita al Santísimo a una Iglesia de un Convento de Monjas Mínimas de Clausura que hay Archidona, un pueblo de Málaga.
    Allí junto a la entrada suelen dejar libros de Noticias Cristianas.
    Pues este viernes habia un montón de "El invitado imprevisto". Cogí uno y a la vuelta a casa me lo leí de un tirón.
    Me ha impresionado tu fé (que se puede cortar), tu esperanza (a prueba de fuego) y tu caridad (que desbordas con tu entrega de vida).
    Me estás haciendo cambiar totalmente mis planteamientos terrenales y considerar los pocos centímetros que tiene cada uno de nuestros metros.
    Ánimo, rezaré por tí y porque sigas dando ese ejemplo de vida cristiana como miembro del Opus Dei.

    ResponderEliminar
  18. Muchas gracias

    Agradezco tu comentario.

    Recuerdo muy bien cuando de pequeño me explicaron que la fe, la esperanza y la caridad son virtudes teologales y que por lo tanto las concede Dios.

    Desde luego me siento afortunado por haberlas recibido.

    Me alegra comprobar que el Señor se sirve de este libro para preguntar a otras personas por el sentido de su vida.

    Te parecerá mentira pero yo me lo sigo preguntando a diario, varias veces al día, en concreto cada vez que arrecía el dolor; es entonces cuando me viene a la cabeza algo que me dijo un amigo en un momento difícil para mí…

    ¿Por qué Dios permite todo esto, por qué?

    Viendo mi cara de perplejidad me dijo con cierta expectación por mi parte: ¿quieres que te lo responda con una, dos, o con tres palabras?.

    A continuación me aclaró: con una, cielo, en dos el cielo, y en tres deseo el cielo.

    Este comentario me ayuda a dar un sentido a mi situación actual, espero que a ti también te ayude.

    Un abrazo

    ResponderEliminar
  19. He visto que has publicado un libro. Has pensado en hacerlo en una editorial on-line? la ventaja es que puedes poner un enlace en tu blog y la gente puede comprarlo por internet o descargarselo en casa en formato e-book, el precio lo pones tu y a ti no te cuesta absolutamente nada. Te recomiendo las editoriales BUBOK y LULU. Saludos!

    ResponderEliminar
  20. ¡Gracias, Jose!
    lo tendré en cuenta :)

    ResponderEliminar
  21. Hola Joaquín,

    Soy Reyes, solo quiero decir que conocer tu testimonio a través de tu libro y tu persona, me ha ayudado a acercarme más a Dios, pues eres un auténtico testimonio de su existencia en la tierra.

    Muchas gracias por tu cercanía, sencillez, generosidad, tus oraciones, en una palabra eres aquello que todos debíamos ser, testimonio de amor a través de la bondad, a pesar de la circunstancias, abandonándonos a la voluntad de Dios, El que nos creo desde su Amor Infinito, el único y verdadero fin de toda nuestra existencia.

    Dios te bendiga amigo

    Reyes

    ResponderEliminar
  22. Reyes:

    Agradezco tus cariñosas palabras.

    Me alegra comprobar que Dios actúa, como dices en tu e-mail, a través de los hombres.

    No pongo en duda que el Señor, como decía el fundador del Opus Dei, escribe recto con renglones torcidos.

    Espero que tú también puedas dar a conocer entre tus amigos y conocidos todo lo que transmite este libro.

    Recuerdos y gracias
    Joaquín

    ResponderEliminar
  23. Hola Joaquín,me llamo Josefina. Me ha dado tu contacto mi marido que es amigo de Cesar De Pablos del colegio Viaró. Me gustaría que contactaras conmigo pues, yo también tengo una invitada imprevista, en mi caso se llama ELA. Espero tus noticias y poder comentar.
    Amigos en la fe.
    Josefina

    ResponderEliminar
  24. Josefina:

    Gracias por ponerte en contacto conmigo. Si quieres mándame un e-mail directamente y, si lo prefieres, me das un número de teléfono y te llamo personalmente.

    Un saludo

    ResponderEliminar